09/05/2014 por Marcelo Paz Soldan
Santiago Sentimental: Entrevista a Gonzalo Lema

Santiago Sentimental: Entrevista a Gonzalo Lema

gonzalo lema

Santiago Sentimental
Entrevista a Gonzalo Lema
Por: Cecilia Romero

Gonzalo Lema (1959) ha sido noticia estos días por distintos motivos; recientemente ha publicado su libro de cuentos La reina del café y otros cuentos policiales (La Hoguera, 2014) donde el personaje Santiago Blanco, investigador nómada, vuelve a caminar por la ciudad y a resolver cruentos asesinatos. Un detective que los lectores califican de entrañable y cercano. Además, este escritor tarijeño con la novela Siempre fuimos familia, ambientada en la revolución de 1952, ganó la Primera Versión del Premio Internacional de Novela Kipus, concurso literario en el que participaron catorce países y cuarenta y nueve novelas.
Conversamos con Gonzalo para preguntarle sobre Santiago, su personaje solitario y sibarita, que reencuentra un viejo amor, pero también para ahondar en los temas que hacen su proceso escritural y todo lo que circunda al mundo del prolífico escritor.
En su último libro La reina del café y otros cuentos policiales vuelve un Santiago Blanco en condiciones donde lo apocalíptico y la esperanza que da el amor se mezclan ¿Cómo fue volver a encontrar a Blanco después del tiempo?
Fue muy triste, porque lo encontré en la absoluta miseria material. Al mismo tiempo, advertí que algún principio suyo se había modificado debido a la elemental necesidad de sobrevivir. Es por eso que puede quedarse a vivir en el edificio Uribe. Por lo demás, Santiago Blanco es un eficiente investigador y, visiblemente, un hombre sentimental.
¿Hasta qué punto Gonzalo Lema es Santiago Blanco y en qué punto Gonzalo se pierde en Santiago?

Tenemos una lectura crítica de la sociedad muy común, es cierto, pero también es cierto que tenemos dos orígenes sociales muy distintos. Nos une la solidaridad con la gente del pueblo, el gusto, hasta el encantamiento, de sus diversas manifestaciones. Pero Blanco es un policía, y eso significa una manera dura de ver la vida. Yo soy un escritor, y puedo abstraerme de todo.
¿Hay un contexto político y social que este libro aborda de manera deliberada?
Blanco y yo, como Carolina de Mónaco, somos de la misma edad. Vivimos el mismo tiempo histórico. Él es udepista, wilstermanista y crítico de los gobiernos posteriores. No ha emitido opinión, sin embargo, sobre el gobierno de Evo Morales. Seguramente necesita mayor objetividad.
La soledad es el telón de fondo de los relatos ¿Por qué?
Bueno, efectiva y esencialmente es un hombre solo que ahora vive con Soledad, valga la ironía. En realidad, todos estamos solos en esta vida, pero acompañados. A él le ha faltado compañía porque se ha educado en Punata para vivir en Cochabamba, y porque es investigador y en ese oficio se desconfía de la gente. Pero, además, es un hombre triste. Solo y triste, y eso se debe a sus múltiples orfandades.
Recientemente ha ganado el Premio de Novela Internacional de Kipus ¿Podría darnos algún adelanto de la trama de este relato? ¿Qué detona esta historia?
Es la historia larga de una familia llena de excentricidades y extravagancias, con pasados conflictivos y curiosos, con enormes dificultades para acoplarse a lo socialmente establecido.
¿Cómo siente que fue percibido este premio en el mundo literario?
A mis lectores les encantó y me felicitaron. No puedo hablar sobre los escritores, salvo mis amigos.
Hace poco declaró: “(…)Tengo la pretensión de convertirme en uno de los tres mejores escritores de Bolivia” ¿Podría explicar este punto que ha generado opiniones diversas en las redes sociales?
La respuesta completa a esa pregunta es: Pretendo testimoniar mi tiempo y mi sociedad con mis novelas y cuentos. Esa es mi ambición desde siempre, para eso trabajo, y voy a ser el primero en advertirlo si lo he logrado o no.
¿Cómo recibes la crítica?
Siempre bien. Tengo la capacidad para reconocer la crítica fundamentada de la simple opinión, entusiasta o malintencionada.
Para finalizar ¿Qué esperas de Gonzalo Lema?
La gran novela y el gran libro de cuentos.
Fuente: Ecdótica