Por María José Richter
Hace cuatro años falleció Juan de Recacoechea, autor de la célebre novela American Visa y París no era una fiesta. Su hija, Paola, en esta entrevista, lo recuerda como un escritor metódico, enamorado de su ciudad, y dado a la cultura.
Juan de Recacoechea nació el 11 de agosto de 1935 en La Paz, en el barrio de Sopocachi. Se graduó en Lima y unos años más tarde estudió periodismo en París. Residió 15 años en Europa, donde participó como asistente de dirección en varias películas. Entre 1958 y 1968 vivió en Holanda, Inglaterra, Austria, España y Suecia.
Cuando vuelve al país funda la Televisión Boliviana, donde trabaja como jefe de producción. Sin embargo, la escritura pisaría fuerte en su vocación cultural. Al llegar a Bolivia inicia también la escritura de sus textos narrativos, el primero de ellos es la novela Fin de semana (1977), editada por Los Amigos del Libro.
Su hija, Paola de Recacoechea, comparte algunas memorias sobre el oficio de escritor de su padre y su vida dentro de la casa. “Soy hija única. Mi papá me tuvo a los 45 años. Él era una persona bastante cariñosa. Como todo escritor, era solitario e introvertido, necesitaba sus momentos a solas. Un amante de la cultura, a mí me inculcó mucho la literatura y el cine”.
De todos los momentos vividos junto a su padre, hay uno que ella recuerda con especial cariño. “Mi mamá trabajaba en una boutique de ropa y mi papá se quedaba en la casa a escribir en su máquina, no usaba computadora. Yo era chiquita, pero él me hacía preguntas raras sobre lugares y personas. Luego supe que formaron parte de su novela más conocida. Él escuchó el universo de la infancia para llevarlo a su texto”.
“Mi padre era muy metódico. Comenzaba a escribir después del almuerzo y decía que tenía que escribir diariamente dos páginas. Hacía resúmenes a mano de lo que escribía en el día y la semana”.
‘American Visa’
Con American Visa recibió el Premio Guttentag de Novela en 1994. Hasta el momento, fue traducida al inglés, al hebreo, al ruso, al francés, al griego y al esloveno. En 2005 Juan Carlos Valdivia lleva a la pantalla grande la novela. La cinta recibió varios galardones en diversos festivales tanto nacionales como extranjeros.
“Para escribirla mi papá iba a los lugares, visitaba los barrios. Fue a los prostíbulos de El Alto, por ejemplo, donde conoció a varias personas que devinieron en personajes. Estuvo muchas veces de incógnito o se hacía pasar por otras personas para que la gente le cuente historias. Le gustaba también sacar fotos para describir los lugares”, cuenta la hija del escritor.
American Visa es considerada una de las más importantes novelas del género policial en la literatura nacional. Publicó también La mala sombra (1980), Toda una noche la sangre (1984), American Visa (1994), Altiplano Express (2000), París no era una fiesta (2002), Kerstin (2004), Abeja reina (2009) y La Biblia Copta (2011).
“Al final se volvió crítico con su obra, pero nunca lo escuché decir que no le gustaba algo de lo que escribió. Siempre mostraba su obra, le gustaba que le corrijan y que lo lean. Siempre quiso que sus libros lleguen a la mayor cantidad de público”.
Juan de Recacoechea falleció el 26 de enero de 2017 a los 81 años, y sus obras continúan marcando el imaginario y la cultura paceña.
Fuente: La Razón