“Yolanda Bedregal en vida y obra”, publicación inminente en Bolivia
La poesía boliviana se apresta a vivir un gran acontecimiento: la publicación de “Yolanda Bedregal en vida y obra”, una investigación de Elías Blanco Mamani. La presentación fue el 21 de septiembre, día del centenario del nacimiento de la poeta y novelista. El diario La Razón publicó, con firma de Blanco Mamani, el primer capítulo del trabajo.
“Yolanda Bedregal nació el día de la primavera, el 21 de septiembre de 1913, para traer mensajes de amor y de vida” dice el investigador, que recuerda además que la poeta “ha reflexionado y le ha escrito a su propio nacimiento con versos que dicen: ‘Último día de invierno y primero de la primavera. Último día de la tibia tiniebla de la entraña para entrar en la fría luz del mundo. Ya estaría madura de la sombra, de la Nada, del amor; madura de la carne en que crecía. Y asomó mi cabeza con un grito: Flor de sangrante herida. Cúspide lúcida del dolor más hondo”.
El padre, Juan Francisco Bedregal, “con sus talentos de poeta, narrador y educador, fue quien moldeó el alma de Yolanda Bedregal”. Las letras y en particular la poesía, agrega el investigador, “fueron creciendo en la niña Yolanda de manera precoz”.
Es un período que la poeta reflejó en sus textos, con recreación de texturas, aromas colores y canciones.
Cursó estudios primarios en escuela pública y los del ciclo secundario en el Instituto Americano de la zona de Sopocachi, donde obtuvo el bachillerato de Ciencias y Letras. Corría el año 1928.
“Durante su vida escolar enseñó aritmética y gramática en el colegio Sagrados Corazones como compensación por la pensión escolar de su hermana Carmen Cecilia y del hijo de su tía, Neftalí Aramayo. También dio clases a alumnos de cursos inferiores en el Instituto Americano, del cual era alumna regular y su padre era profesor de castellano”, prosigue el texto.
Con inclinación también por la escultura, la poeta ingresó con 19 años a la Escuela de Bellas Artes, para cursar pintura y modelado, al tiempo que dedicaba energías también a la música, en el Conservatorio Nacional.
Blanco Mamani escribe que de 1932 data uno de sus primeros textos en prosa poética, titulado “Primer amor”, que figura en su “Obra completa” (2009).
“Primer amor –escribió por entonces Bedregal-: mezcla incoherente de extrañas sensaciones. Sonidos de color, colores de perfumes, matices de color, sabor de horas y de cosas que se perciben en una extraña vida que a fuerza de intensidad ya ni parece ser nuestra. El corazón percibe las sensaciones como si fuera único receptor. De entonces, de mi primer amor, no distingo el color del perfume ni del sonido. Todo va desordenado y superpuesto sobre un eje único como si en un hilo largo ahorcándome se ensartan la voz del cura, el humo de las ceras, los teoremas de álgebra, rimas de Bécquer, flores, campos, estrellas, catedrales, juguetes, castigos, cuentas de rosario, malas palabras, lágrimas, calles, horas desmenuzadas”.
Fuente: www.lapoesiaalcanza.com.ar/