Un encuentro para estudiar Bolivia
El Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos es el evento más grande dedicado a estudiar Bolivia en sus múltiples dimensiones, desde diferentes y amplias perspectivas. Corre del 24 al 28 de julio en el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. Puño y Letra preguntó a algunos de sus asistentes sobre la importancia de este evento y cuáles los puntos del programa que rescatan. Esto fue lo que nos contestaron.
Paula Zagaslky, CONICET, Universidad Nacional de Jujuy, Argentina. Coordinadora del simposio Potosí: repensando la ciudad desde sus actores (siglos XVI-XXI)
1. El Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos es un evento ya clásico para quienes nos dedicamos a estudiar Bolivia en sus múltiples dimensiones, desde diferentes y amplias perspectivas. Antropólogxs, arqueólogxs, historiadorxs, sociólogxs, y otrxs estudiosxs nos reunimos para compartir y contribuir, con nuevas miradas, sobre los más variados aspectos ligados a las lenguas, las músicas, el cine, el arte de los textiles y los grupos humanos y sus dinámicas pasadas y presentes. Desde la cuarta edición disfruto de este gran encuentro con prestigiosos colegas y amigos que vienen de distintos puntos de Bolivia, América Latina y el resto del mundo. Es una semana especial que, cada dos años, nos permite conocer, compartir y aprender. Siempre una experiencia que nutre y estimula y que nunca defrauda. El evento se apoya en la notable capacidad organizativa y de trabajo y la calidad humana del personal del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia que, de forma generosa y desinteresada, nos recibe tendiendo la mano para ayudar a todxs los participantes y cubrir cada uno de los detalles del evento.
2. Esta edición del AEB contará con la presencia de más de 500 académicos y estudiosos de Bolivia, procedentes de distintos puntos del planeta. Propone 36 simposio que girán en torno a un abanico muy amplio de temas interesantes y vigentes sobre el patrimonio, la historia, arqueología, sociología, salud, psicología, cine, economía, literatura, política y filosofía. Además la edición contará con presentaciones y venta de libros, conferencias magistrales, coloquios y debates, el homenaje a historiadorxs que han partido en los últimos años, proyección de documentales y música. En suma, es difícil elegir un momento en el marco de una semana que promete ofrecer un festín para todos los sentidos. Es por eso que recomiendo explorar el programa y que cada unx pueda elija y participe de esta semana de fiesta para quienes nos interesamos en Bolivia.
Cecilia Peñaranda Del Carpio, investigadora Universidad San Simón, Cochabamba.
1. Me parece que la importancia del congreso radica en brindar un espacio de encuentro, debate y construcción para la investigación en Bolivia. La plataforma que proporciona el congreso permite un diálogo para la construcción de conocimiento.
2. En cuanto al programa, creo que es muy rescatable la cantidad y variedad de mesas, que dan cuenta del trabajo investigativo que existe en el país. Hay mucho por escuchar la próxima semana.
Masaki Sato, Universidad de Nihon, Tokio, Japón. Coordinador del simposio El mundo de las minas y su entorno en Charcas virreinal.
1. Participé por primera vez a este congreso en 2015. El tamaño de la ciudad de Sucre se ajustó perfectamente al del congreso, y para mí fue una semana de fiesta muy bonita y densa, con toque académico. Es decir, todos los días en cada rincón del centro histórico encontré a alguna especialista de Charcas, y dentro o afuera de los simposios disfruté las comunicaciones que no serían fáciles de tener en mi país, Japón. En resumen, este congreso me ofrece una ocasión preciosa de activar mi estudio y de conocer más a Bolivia.
2. Puesto que soy adicto de la historia colonial de Charcas, me interesan dos simposios que tienen lindo punto de observación.
Simposio 13 repensa la “Villa Imperial” de Potosí en su larga duración (siglos XVI-XXI). Las ponencias ponen énfasis en los actores/agentes, lo cual da una coherencia en este gigante simposio. Igualmente me gusta la estructura del simposio en que hay cuatro comentarios para cada parte.
Simposio 14 es, al contrario, limita su enfoque al siglo XVIII, pero abarca los casos de todo el Alto Peru (y más allá). Así, es un intento de examinar las rebeliones en el Alto Perú en el siglo XVIII con la mirada horizontal o comparada.
Franz Flores, investigador USFXCH.
1. Yo creo que la importancia de la AEB radica en que reúne a investigadoras tanto nacionales como extranjeros cuyos trabajos tienen que ver Bolivia. De esta manera las personas que asistan al evento tendrán acceso a diferentes miradas sobre Bolivia. Desde la sociología, la economía, la historia, etc. Y esa es la riqueza del evento. Que además creo único en el mundo. Todos los investigadores debatiendo sobre un solo caso de estudio, Bolivia
Una de las cosas a relievar es que Sucre durante unos días se convierte en la capital de la investigación social en Bolivia. No hay ninguna otra actividad parecida en nuestro país que tenga estas características. Es de destacar también la presencia de jóvenes investigadores que aportan nuevas visiones.
2. En el programa se puede ver tanto a los académicos con larga trayectoria junto a nuevos investigadores, que hace pensar que las Ciencias sociales tienen un buen presente pero también un gran futuro. Con todo, no veo miradas comparativas entre Bolivia y otros países. Esa carencia es peligrosa en tanto que hoy no puedes hacer ciencia social sin comparar. Otra carencia es la ausencia de trabajos que reflexionen sobre el uso de la metodología en las Ciencias sociales.
Wim Kamerbeek, investigador independiente.
1. Como politólogo recién titulado, el Congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos sirve para dar a conocer mi trabajo. Somos pocos jóvenes a los que el campo intelectual nos reconoce de alguna manera porque, hay que decirlo, en Bolivia los líderes de opinión o intelectuales más reconocidos me llevan como 20 años, y los mismos lectores toman seriamente lo que dice alguien de más edad que nosotros.
Pero también está el escaso debate. Si bien las redes sociales han ayudado a varios a difundir sus ideas, en mi caso, que estudio las significaciones sobre mestizaje y nación en las obras de Carlos Mesa, Álvaro García Linera y otros, he tenido pocas oportunidades de confrontar mis ideas con otros criterios. Y si las he difundido, no he recibido críticas como las que podría recibir por ejemplo, de Rafael Bautista u otros autores indianistas con quienes, a propósito, comparto en el Simposio “Filosofía Made in Bolivia”.
Por último, tengo interés en estudiar democracia indígena y democracia representativa en los meses que vienen, y en el Congreso podré, de alguna manera, entrar de lleno en el asunto.
2. Como puntos altos del congreso rescato: primero, el Coloquio “Zavaleta Mercado Hoy” a cargo de Luis Tapia, Luis Antezana y Mauricio Souza. Segundo, el Simposio “Aportes histórico políticos bolivianos al pensamiento crítico latinoamericano. Genealogías críticas del presente y pensamiento situado”. Tercero, el Simposio “Pensar con y el cine desde la academia”. Cuarto, “anarquismo, autonomía y comunitarismo en Abya Yala” y por último, “velos y revelaciones: aproximaciones a mujeres de papel y pluma en mano en la literatura boliviana de los siglos XIX y XX”
En el primer caso, se trata de autores a los que he leído bastante, pero también sobre un autor por el que tengo como una reciente obsesión por su pensamiento y su escritura, como Rene Zavaleta Mercado. Lo segundo está relacionado con lo primero: Zavaleta. Pero también hay algún autor indianista al que quiero escuchar, como Macusaya. En el tercer caso, conozco pocos autores que piensen al cine desde la academia (mi referencia es Zizek y eso ya dice algo), y el cine, pienso, mantiene una relación muy cercana con el análisis social o, en mi caso, político, porque refleja digamos, sutilmente, las tensiones existentes en una formación social. El cuarto, me interesa por Silvia Rivera Cusicanqui, a quien he leído bastante para mi tesis de licenciatura. Y quinto, no me declaro feminista pero admiro mucho la lucha marginal en contra de un centro político cada vez más grande y al mismo tiempo, cada vez más cerrado sobre sí mismo. Y creo, al mismo tiempo, que el feminismo ha perdido poder de interpelación en los últimos meses. No sé a qué se debe, pero revisitar a autoras bolivianas de otras épocas, va a ser muy enriquecedor.
Magdalena González, CONICET, Universidad Nacional de Córdoba. Coordinadora del simposio Aportes histórico políticos bolivianos al pensamiento crítico latinoamericano. Genealogías críticas del presente y pensamiento situado
1. El alcance de eventos de esta magnitud impacta directamente en nuestros estudios dedicados a Bolivia. Es decir, la especificidad de nuestros estudios hace que los congresos organizados por la Asociación de Estudios Bolivianos sean de una pertinencia única que, además, permite momentos de aprendizaje y de adquisición de conocimiento dado que en el Congreso conviven diversas disciplinas que pueden dialogar y aportarse mutuamente en una vía de doble mano como lo son los estudios trans e interdisciplinarios. Por tanto, la importancia del Congreso se evidencia en varios frentes: en cuanto al encuentro de investigadores que, aún desde diferentes áreas, se encuentran para dialogar sobre Bolivia, como instancia de aprendizaje, como momento de reunión. Y, como un plus, es posible visitar Sucre y sus hermosos paisajes.
2. El programa de este año me parece muy interesante. Rescato como puntos muy relevantes la mesa de discusión referida a la obra de René Zavaleta Mercado con la participación de Luis Tapia, Mauricio Souza y Luis Antezana. También la presentación del libro de Verónica Cereceda De los ojos hacia el alma (Plural, 2017) a cargo de Xavier Albó. Y por supuesto las participaciones de investigadores tanto bolivianos como de otras latitudes que han hecho de los estudios bolivianos una ruta de vida.
Ivanna Margarucci, CONICET, Universidad de Buenos Aires; Centro de Documentación e Investigación de la Cultura de Izquierdas (CeDInCI); Universidad de San Martí. Coordinadora del simposio. Anarquismo, autonomía y comunitarismo en el AbyaYala – Nuestra América
1. La importancia de un evento como el Congreso de la AEB no se resume a una sola cuestión. Un congreso de estas características, en primer lugar es un espacio de encuentro entre un montón de pensadores, investigadores, que se interesan por distintas temáticas de la historia, la sociedad, la cultura y hasta la geografía de Bolivia. No sólo bolivianos, sino también extranjeros. Además de espacio de confluencia, en segundo lugar, actúa como un dinamizador, un catalizador de producciones académicas sobre esos temas, bajo el formato de ponencias expuestas en los simposios y en las conferencias que tienen lugar por fuera de ellos. En este sentido, la periodicidad del Congreso de la AEB garantiza que constantemente se esté no sólo produciendo, sino también debatiendo y en algunos casos también publicando, en torno a los más diversos tópicos -tal como se puede ver en el listado de simposios en el programa del Congreso. La reunión, la producción, el debate y la difusión serían entonces los puntos más importantes vinculados a la realización del Congreso de la AEB.
2. Como señalaba antes, los puntos fuertes del programa son dos. Por un lado, la gran diversidad de simposios temáticos que hay. Se abordan diferentes problemáticas, que tocan desde la historia indígena a la historia contemporánea y reciente de Bolivia; cuestiones relativas a su sociedad y cultura o a la espacialidad y territorialidad; también aspectos más conceptuales y teóricos, que invitan a la reflexión sobre historiografía, política y filosofía. Esto tiene que ver con la interdisciplinariedad por la que apuestan los organizadores del Congreso y garantiza en definitiva una gran variedad de público expositor y asistente. Por el otro, las conferencias y presentaciones de libros, realizadas por fuera de los simposios temáticos, también abarcan distintos temas y traen a figuras muy importantes de la intelectualidad boliviana y latinoamericana.
Unas preguntas a Andrea Barreo (dirección organización)
– ¿Cuáles fueron los principales retos para la organización de este año?
Creo que uno de los mayores retos en este tipo de eventos es consolidar los canales de comunicación entre coordinadores, organización y expositores. Por suerte ahora contamos con una variedad de medios que permiten una comunicación fluida y rápida, logrando así una mejor coordinación entre todos los involucrados.
– ¿Cuáles son los temas más destacados este año. ¿Qué elementos se han incluido que no estaban en otros encuentros?
Una de las características del congreso de la Asociación de Estudios Bolivianos es que refleja los temas que van tomando importancia dentro del espacio académico boliviano. En esta oportunidad destacamos los estudios sobre territorio, fronteras, planificación urbana y rural. Además, es necesario resaltar la interdisciplinariedad de muchas de los simposios propuestos.
Entre los elementos nuevos es importante destacar las actividades propuestas por los mismos participantes, como la proyección de documentales, organización de coloquios y otras actividades anexas al congreso. Paralelamente es destacable la participación de varias editoriales en la feria del libro, las presentaciones de las novedades bibliográficas bolivianistas, entre las que se destaca la Revista de la AEB, y claro, la presencia de la Biblioteca del Bicentenario con la presentación de una de las obras que forman parte de este proyecto.
– ¿Cómo ha ido creciendo y se ha consolidado el encuentro?
El encuentro de bolivianistas ha ido creciendo con el paso del tiempo. Tanto en número de expositores como de participantes. Es una alegría para nosotros contar con investigadores de diferentes generaciones compartiendo un mismo espacio de debate y reflexión.
Empero la consolidación y crecimiento del evento no solo se refleja en el número de participantes, sino también en el número de centros que abren sus puertas al congreso. En este sentido el apoyo de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia y sus centros dependientes presentes en la ciudad de Sucre fueron vitales. Sin la participación del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia, la Biblioteca Pública “Gunnar Mendoza Loza”, el Museo de Etnografía y Folklore regional Sucre (MUSEF) y la Casa de la Libertad, además del Museo Antropológico, la organización del congreso no sería posible.
La AEB en breve
La Asociación de Estudios Bolivianos (AEB) es una organización sin fines de lucro y sin fines políticos cuyo propósito es promover e impulsar la investigación y la difusión del conocimiento sobre Bolivia. De acuerdo con esta misión, la AEB pretende ser un foro interdisciplinario y un recurso para fomentar la colaboración entre investigadores bolivianos y los del resto del mundo.
La AEB organiza un congreso internacional y transdisciplinario que reúne cada dos años a bolivianistas de diferentes partes del mundo.
Para contribuir a la difusión de la actualidad de la investigación bolivianista la AEB publica una revista semestral, la Revista de Estudios Bolivianos / Bolivian Research Review (ver pestaña Revista AEB), actualiza regularmente noticias sobre publicaciones y otras actividades en su página Facebook, así como en su página web (ver pestaña Novedades bolivianistas y Publicaciones). Cada socio con su membresía al día, recibe una contraseña y tiene la posibilidad de descargar la Revista, contactar a sus colegas e ir actualizando su información y novedades académicas.
IX CONGRESO DE LA AEB
Una de las principales actividades de la Asociación de Estudios Bolivianos (AEB) es el encuentro e intercambio en congresos académicos. El primer congreso se realizó en New Orleáns (2002), el segundo en La Paz (2003), el tercero en Miami (2005), el cuarto en Sucre (2006). En cada caso, acreditadas instituciones co-auspiciaron el evento: la Universidad de Loyola en New Orleáns, la Carrera de Literatura de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), el Centro de América Latina y el Caribe de la Universidad Internacional de la Florida en Miami. En el año 2006, varias instituciones y sus coordinadores, desde diferentes puntos del país, apoyaron decididamente el cuarto congreso: el Archivo de La Paz (ALP), de la Universidad Mayor de San Andrés; Antropólogos del Sur Andino (ASUR), la Fundación Cultural La Plata, en Sucre; el Programa para la Investigación Estratégica en Bolivia (PIEB), el Institut de Recherche pour le Développement (IRD) en La Paz; el Instituto Francés de Estudios Andinos (IFEA) en Lima, así como representantes del CIDES (UMSA, La Paz), Universidad Católica Boliviana (La Paz), Universidad Nur (Santa Cruz) y, por supuesto, el Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia en Sucre. Este año toca el IX Congreso en la sede oficial, Sucre.
Fuente: Puño y Letra