Por Indira Isel Torres Crux
Colima-México
En las páginas de Gabriela se dice de tres formas, la poesía se convierte en un acto de revelación, un espejo roto que refleja la crudeza de la vida y muerte de Gabriela Ramírez, una mujer trans cuya existencia y trágico final resuenan en cada verso. Juan Pablo Vargas Rollano, desde su raíz en La Paz, Bolivia, trasciende fronteras y temores para destapar una narrativa silenciada y urgente que trae al presente la voz y lucha de las mujeres trans en Latinoamérica.
A través de cinco apartados meticulosamente entrelazados, Vargas Rollano nos guía en un viaje íntimo y visceral.
En “Hallazgo”, el poema se erige como un altar y reclamo, una fogata ardiente que enciende tacones, besos y maquillaje en una procesión simbólica, mientras el eco de la vida de Gabriela resurge en medio de las llamas. A medida que avanzamos, el autor nos guía por los laberintos de la cultura y la ruptura, entrelazando lo clásico con lo contemporáneo, como si tejiera el legado de Grecia y Roma en la textura misma del mundo actual.
Cambios tipográficos son su herramienta de cincel, tallando voces, cuestionamientos y desnudez en “Los poemas”. Los versos evocan el clamor de la justicia, la mirada que desenmascara, que desgarra velos de indiferencia y despierta conciencias adormecidas. La poesía se convierte en un grito visceral, en la visión descarnada de un cuerpo maltratado, y a través de esa brutal exposición, emerge: “Una mujer trans no puede ser amada sin violencia”.
En “La Narración”, el lenguaje audazmente despojado revela el dolor y el amor entrelazados en las vidas de las mujeres trans, mientras las negritas resuenan como símbolos de amor y reconocimiento en un mundo que a menudo elige ignorar. Los versos exploran la dualidad de la existencia, desafiando las convenciones y declarando la identidad con una valentía que penetra el alma del lector.
A medida que el poemario avanza a través de “La Argumentación”, se despliega una lucha por la identidad y la justicia. El poeta desafía la imposición de roles y nombres, revelando cómo la sociedad arranca el derecho a ser uno mismo y arroja a las mujeres trans a la periferia, condenadas a la burla y la explotación. El apartado se convierte en un tribunal de denuncia donde el grito de las mujeres trans se hace presente, desafiando las narrativas preestablecidas.
En el clímax de “Lo Político”, el poeta dirige su mirada al sistema judicial, exponiendo cómo la vulnerabilidad se convierte en una atracción exótica, un espectáculo folklórico que no logra entender ni abordar su verdadera realidad. El poema se convierte en un grito de desafío ante la negación de justicia y la perpetuación de estereotipos dañinos.
Finalmente, en “La Peroración”, Vargas Rollano lanza un golpe final, desvelando la insidiosa y dolorosa realidad del abuso sexual enfrentado por las mujeres trans. La crudeza de sus versos revela la brutalidad de una sociedad que insiste en negar la humanidad de estas mujeres, relegándolas a una vida marcada por el sufrimiento y la degradación.
Gabriela se dice de tres formas no es simplemente un poemario; es una poderosa declaración de existencia, resistencia y rebeldía. Con cada verso, Vargas Rollano reclama el derecho de vivir y amar sin miedo ni violencia. Este libro es un espejo roto, una reflexión incómoda y urgente que desafía nuestra comprensión de la identidad, la justicia y el amor en la Latinoamérica contemporánea.
Fuente: Ecdótica
