“No podría escribir un texto costumbrista”
Entrevista a Cé Mendizabal
Por: Michel Zelada Cabrera
Cé Mendizábal dice que desde el pasado miércoles ha terminado su paz. Ahora su celular vibra tres veces por minuto y sus acreedores están más alertas que él mismo sobre cuándo y cuánto dinero va a recibir por ganar el Premio Nacional de Novela Alfaguara.
Este décimo quinta versión del certamen esta marcada por dos hechos importantes: Primero que es la segunda vez que Mendizábal recibe este galardón. En 1999 por “Alguien más a cargo”.
Y segundo, es la versión que más participantes ha tenido en 15 años de vigencia. El jurado leyó 60 manuscritos.
Narrador, periodista y poeta, el flamante galardonado por la novela “Pasado por sal” cuenta en esta entrevista (vía correo electrónico), desde la La Paz, los entretelones de su trabajo literario.
– La pregunta de rigor (por el carácter aún inédito de la novela ganadora): ¿cuáles son los ejes de la trama de tu obra y en que contexto se desarrolla?
Hay una serie de voces narrativas que se entretejen en dos tiempos: los 70 y los 90.
Con ello busco trazar una época dura en términos políticos –la dictadura–, y otra de transición a la democracia, en los 90. La historia se sucede en esos dos períodos, pero algunos personajes que vivieron ambos momentos tienden a confundirlos a raíz de la presencia de una mujer muy hermosa y misteriosa.
Una tal Midori Nagashiro, una chica de ascendencia japonesa que bailaba en una boite paceña en los 70. Ése es uno de los ejes centrales, pero hay otros que dejo a la curiosidad del lector.
– Según el acta del jurado: “La primera virtud de esta obra es el manejo del lenguaje, el manejo del narrador que mira estampas, partes de la ciudad de La Paz y los va compaginando después a través de los personajes”. Entonces, ¿estamos hablando de una obra que incluye a la ciudad de La Paz como un personaje más? ¿Una novela urbana?
Sí, totalmente. No podría escribir un texto costumbrista o rural… El momento actual es de las urbes cosmopolitas, las urbes genéricas, que dice Reem Cooljas. A pesar de ello, La Paz es una ciudad única, con un entorno magnético dictado por la presencia tóxica de las montañas.
Esto es para bien y para mal: los narradores paceños amamos y armamos nuestras versiones de La Paz en nuestros trabajos, pero demasiado a menudo también caemos en las mitomanías. Muchos se interesan más en la vida curiosa de Jaime Saenz, que en la literatura brillante de Jaime Saenz. Eso es un error.
– Es la segunda vez ganas este concurso. Cuéntanos que sentiste cuando te avisaron, allá en 1999, que habías ganado con “Alguien más a cargo”. Y lo propio cuando te enteraste, este 2013, que ganaste por segunda vez con “Pasado por sal”.
La primera vez, se me soltó el estómago. La segunda, apenas un poco de presión en la vejiga. Mil disculpas por estas respuestas prosaicas, pero el cuerpo tiene su propio lenguaje, sus propias protestas y sus modos bien sumarios de hacerse escuchar. Recién recordaba a David Foster Wallace que decía que nueve de cada 10 veces es más divertido desear que tener.
Mientras deseaba el premio, estaba muy tranquilo pintando o malgastando la tarde en un café. Ahora que lo tengo, mi celular vibra a razón de unas tres veces por minuto y ha dado al traste con toda mi paz.
– Hay algunas voces que dicen que los escritores ya consagrados y que han ganado premios deberían abstenerse de participar en estos certámenes para dar paso a los nuevos (“jovenes” escritores) ¿Que piensas de eso? ¿Cual la importancia de la vigencia de los certámenes literarios.
No, no lo creo. Es una opinión tan pobre como la de Fernando Vallejo cuando le pidió a García Márquez que se abstenga de escribir. ¿Qué festejamos, la literatura o los autores? El tiempo actual, que es comercial, nos dice que a los autores. En esa medida, siempre hay que hacerle campo al último modelo, lo que es nomás una de las tantas aberraciones de este tiempo.
Yo digo que los autores importan un pepino, que lo que interesa es la obra. Eso es lo que nos sobrevive… o acaso no. Daría dos dedos de cualquiera de mis manos porque García Márquez siguiera escribiendo, porque pariera los siguientes cien años de soledad.
– Hiciste poesía, novela, critica cinematográfica, trabajaste en un periódico, ¿cuál de estos oficios te ha dado mayores satisfacciones?
Todos, si te voy a ser franco. Por supuesto que los libros son hijos muy especiales… Pero había una gran satisfacción cuando busqué y encontré un nombre para el suplemento literario de La Prensa, a mediados de los 90: Fondo Negro, que viene de un bellísimo poema de Guillevic.
– Como ves la dinámica actual de la literatura boliviana.
Bien, muy bien a momentos. Tipos como Rodrigo Hasbún, Maximiliano Barrientos, Giovanna Rivero o Sebastián Antezana están rompiendo el viejo y triste prejuicio de que lo boliviano es prescindible.
Siento horrores que Jesús Urzagasti se hubiera ido sin un mayor reconocimiento. Unos meses antes de que muriera le dije a un amigo que si él hubiera sido chileno o colombiano fácilmente hubiera recibido el Cervantes. No ocurrió, pero tú, que eres lector acucioso puedes ver la enorme diferencia de Jesús y autores como Skármeta, Bryce Echenique o el propio Edwards…
– No recuerdo con detalle “Alguien más a cargo” (la leí hace 11 años creo). Pero había una buena dosis de humor, de ironía, principalmente en el protagonista. ¿Mantienes ese ritmo de humor en “Pasado con sal”?
“Pasado por sal es una novela muy distinta, desde las múltiples voces que la cruzan, pero, claro, el humor es algo que debo llevar muy adentro, porque hay momentos que te van a retrotraer a Alguien más a cargo. Sin embargo, creo que son los menos.
– ¿Recuerdas que hiciste con el dinero del premio en 1999? ¿Que piensas hacer con los 15 mil y tantos dolares que recibirás ahora?
Sí. Me compré una caja de puros y los disfruté en lugares con un poco más de oxígeno que La Paz, digamos La Habana o Cuernavaca… Hay una lista un poco extensa por ahí. Hoy tendré que hacer algo semejante o acaso muy diferente. Aún no lo sé, porque mis acreedores están más alertas que yo mismo.
– Un buen escritor es también un buen lector. ¿Cuáles son tus lecturas y autores de preferencia?
Por hoy David Foster Wallace. Es un descubrimiento fenomenal, alguien que te puede tener ocupado por muchos años. Es una lástima que no hubiera sobrevivido a su mente colosal. Y Coetzee, y Huollebeq…
Fuente: Lecturas