La Perra Gráfica promueve a tres autores cruceños
Por: Christian Daniel Eguez
Del 2 al 4 de junio, en la Feria Internacional del Libro en Santa Cruz, se presentará una trilogía de autores cruceños: novela, poemas y cuentos; a cargo de una editorial paceña con artes de ilustradores peruanos.
Se trata de GÉNESIS 4:12, la primera novela del periodista Adhemar Manjón, TEMPORARIAS, la obra póstuma de la poeta Emma Villazón, y DESVELO, la segunda publicación de Saúl Montaño. La editorial paceña La Perra Gráfica se encargó de imprimir a mano 300 portadas en serigrafía a dos colores, con diseños de los peruanos Rodrigo de la Hoz, Eduardo Yaguas y Jugo Gástrico respectivamente.
Cada libro se venderá a Bs 100, pero en preventa está a 80, y si se llevan los tres sale a 200. Estarán disponibles en esta modalidad hasta un día antes de la presentación y para adquirirlos se puede hacer contacto a peces.verdes@gmail.com o al FACEBOOK de la editorial.
¿Pero quienes son estas personas? ¿Por qué el afán de pasarse el trabajo de imprimir artesanalmente las portadas? ¿De cómo deciden conectarse con gente en otros lados? ¿Alguna vez habías visto algo así en Bolivia?
Para entrar al taller de La Perra Gráfica hay que conocer bien las coordenadas, San Pedro es el barrio que los alberga y sabes que has llegado cuando miras al piso y ves un esténcil negro desgastado sobre la acera. La puerta de madera está abierta y pasas una especie de zaguán hasta llegar a una puerta negra de metal desde donde puedes escuchar los rumores casi cercanos de risas y charlas entabladas hace horas. Si hubiese fiesta, probablemente habría un turril con fuego en medio del patio para calentar las heladas noches paceñas, y obvio unas músicas bien pintorescas para animar el alma, pero esta vez hay una feria de publicaciones en una pequeña habitación del piso de abajo y en el de arriba concluyen un taller de serigrafía. Actividades que con regularidad realizan.
Es inevitable sentir el olor de los colores, sobre todo cuando en todas las paredes hay algo pintado.
Abajo está Marco Guzmán más conocido como Marco Tóxico, una especie de caricatura sin cabello andando que desprende ironía en su hablar. Muy atento él, te invita a pasar a ver las ofertas. Hay publicaciones de toda clase, tamaño, precio y contenido, no solo de La Perra Gráfica, sino de otros amigos que hacen todo tipo de publicaciones impresas. Es que tienen claro que la colaboración es algo vital para subsistir en este medio; internacionalistas se dicen ellos, como aquel término ahora en desuso, que la izquierda sesentera utilizaba para poner en cuestión las fronteras oficiales para extender su labor revoltosa por todo lado. “La idea es tratar de romper las barreras que evitan la circulación de libros independientes, y para eso recurrimos a todo lo que esté a nuestro alcance” afirma Antonio Vera. El uso de internet ha hecho que esta forma de trabajo se vuelva más viable.
Arriba más de diez personas están aprendiendo junto con Daniela Rico y Pamela Mercado, en un amplio espacio dividido en dos secciones, como hacer serigrafías sin morir en el intento. De una soga cuelgan las hojas cuidadosamente colgadas con pinches que forman un degradé de tonos, separadas sutilmente para que la pintura fresca seque. Racletas que todavía tienen el espesor de las pinturas en sus esquinas y mallas que con mucho esfuerzo se han limpiado, yacen sobre las pesadas mesas de madera.
Cuando se decide el diseño a serigrafiar se definen las cuestiones técnicas, el tipo de papel, los colores, los tamaños, las tintas, etc. Luego se hace el trabajo de producción y, dependiendo de la complejidad de las tapas, se programan las sesiones de impresión. Normalmente son tres personas las que realizan este trabajo, pero depende de cuánto trabajo necesite el diseño. “Nos gustan los libros, y los libros bellos, eso es lo que queremos hacer. Nuestros tirajes son cortos pero, creo, sensatos para nuestro medio y para la técnica que usamos” confiesa Daniela Rico, que suele usar una máscara cuando realiza este trabajo para que los químicos que usan no la perturben. Fabiola Varnoux también es parte de este emprendimiento que nació el 2013.
En su haber ya han publicado cuatro libros entre literatura y novela gráfica: TAMPOCO ES SUDOKU de Antonio Vera ilustrado por Frank Arbelo, ESTÉRIL de Marco Tóxico, FLORES de Mario Bellatín ilustrado por Paola Guardia y RIZOMA de Carlos Yushimito ilustrado por Daniela Rico. Pero también han publicado: PALETAS un libro para niños y LA DERIVA de Daniela Rico que son Ilustraciones completamente impresas en serigrafía.
“Teníamos la intención de publicar autores nacionales y estábamos en la búsqueda. Distintas circunstancias nos permitieron encontrar estos tres títulos. Y en los tres encontramos lo que nos gusta publicar: textos que desafían al lector, por los temas que abordan y también por sus planteamientos formales. Pero además se dio la coincidencia de que se trata de tres autores cruceños, más o menos de la misma edad, lo que nos animó a hacer un lanzamiento conjunto en la Feria Internacional del Libro de Santa Cruz” explica Daniela, sabiendo el riesgo que afrontarían a nivel económico, pues nadie los financia y esta será la primera vez que sacan tres títulos de un mismo tiro.
La preventa es la táctica que usan para poder costear estas obras, no solo literarias sino también gráficas pues si bien más fácil es imprimir digitalmente, el proceso y resultado de la serigrafía tan complejo y bello a la vez desatan el deseo del objeto.
Los ilustradores
Los tres ciudadanos peruanos tardaron alrededor de un mes para crear su obra, conocían o a Daniela o a Marco, o a ambos por estar relacionados en los mismos círculos de historietas, cómics y carteles. Fueron ellos quienes asignaron a cada uno de los ilustradores la obra sobre la cual trabajarían, de acuerdo al estilo que a cada uno lo caracteriza.
Rodrigo de la Hoz y Eduardo Yaguas pensaron en su diseño desde el proceso de la serigrafía ya que sabían que si había demasiados detalles, sería difícil imprimir y el hecho de restringir los colores a solo dos también obviamente influyó en el proceso del diseño. Ambos conocen Bolivia por que fueron invitados a encuentros de cómics como Viñetas con Altura donde pudieron estrechar lazos con autores del país y disfrutaron mucho su estadía, aunque el sorojchi fue inevitable en La Paz.
Para Yaguas, el hecho de que sea un tiraje limitado eleva mucho más el valor de los libros. “Mis temas siempre han sido elementos o paisajes sin vida. Mucho de los textos hablan sobre eso y de las cosas que se van dejando o de las cosas a la que nos vamos enfrentando” explica el ilustrador con ocho años de experiencia, a quien le resultó extraño el trabajo de TEMPORARIAS porque hace solo unos días se enteró que la autora, Emma, había fallecido hace varios meses, nunca le mencionaron nada sobre ese acontecimiento y si pudiera decirle algo seria que se siente muy honrado y feliz de haber trabajo la portada de su libro.
Fue distinto con GÉNESIS 4:12, “Leí el libro apuntando palabras clave o dibujando bocetos rápidos de imágenes representativas que funcionen bien como metáforas visuales, mi idea era conseguir algo que refleje el tono del libro más que la historia en sí y que cree una tensión interesante con el título” argumenta Rodrigo de la Hoz que trabajó en la obra de Manjón, “Es un libro interesante con personajes bien desarrollados y varias escenas memorables. Me gustó especialmente una en la que el protagonista conversa con un taxista que le cuenta una historia casi mágica de un tapir que vuelve a la vida” relata.
Rocío Urtecho más conocida como Jugo Gástrico fue quien se encargó de ilustrar DESVELO, la obra de Montaño. “Me gustó el tipo de historias porque los personajes que trabajo son bastante urbanos y en algunos casos sórdidos, insólitos, medios vulgares. Es un buen trabajo literario” explica. Ella, fue quien menos pensó en el proceso técnico de la serigrafía lo que complicó la impresión del mismo, llegando a ser un verdadero desvelo para poder terminar a tiempo. Pero sin duda es el arte más trabajado y llamativo visualmente que claramente refleja lo ‘ácido’ de su contenido. La diseñadora gráfica que actualmente trabaja en carteles de cine leyó primero la obra para transmitir su interior.
Los autores
Adhemar Manjón empezó a escribir GÉNESIS 4:12 en el año 2012, el detonante para tomar la decisión de plasmar en papel sus ideas fue un viaje que realizó a La Paz, en honor a la posibilidad de un trabajo y con la sospecha que no iba a tomarlo, así como si se haya tratado de una especie de huida, regresó al siguiente día a Santa Cruz. Ese viaje a la nada, fue la primera chispa, el gran empuje para escribir el borrador del primer capítulo, lo escribió de un tirón, sobre cómo el protagonista de la obra, con la propuesta de un taller de capacitación en La Paz, acepta el curso por el único hecho de viajar en avión por primera vez. Adhemar termina de escribir la obra en septiembre de 2015, por varios meses abandonaba la escritura y la retomaba en la medida en que las vivencias propias, de sus amigos o de gente que conoce, inspiraban su creatividad para escribir la novela. Sin embargo deja en claro que las situaciones no están escritas tal cual ocurrieron.
Este novel autor, apostó desde un comienzo en reflejar en la novela personajes patéticos, o ponerlos en situaciones vergonzosas; sobre todo con la intención de humillar al personaje principal. Desde esa lógica, el protagonista se va cruzando con mucha gente en su trayecto y a partir de ahí surgen situaciones, “quizás para algunos serán situaciones humorísticas, para otros incómodas, y en el peor de los casos no le provocarán nada al lector” – nos indica.
Adhemar es periodista cultural, trabaja en el diario más grande del país, EL DEBER, y sin querer tomar ese hecho como imán para sus lectores, confiesa que mucha gente no sabe que es periodista, pero lo que hace en su trabajo diario, sin duda alguna, no tiene nada que ver con lo que ha hecho en esta novela. Al mismo tiempo no se identifica como “escritor”, por respeto a los autores que él admira y que cuentan con una extensa e impecable labor literaria, pero sí se siente contento por la publicación de su primer libro, por tratarse de algo en lo que le gustó trabajar.
En Santa Cruz no existe más que una editorial y cuatro librerías (bastante limitadas) y, además, con lo que se gana como escritor no se puede subsistir, estos motivos hacen que la publicación de una obra sea más bien un reto. “Creo que en Santa Cruz las autoridades ya han demostrado que la cultura es algo en lo que no les interesa invertir. Pero esa falta de apoyo también se refleja a nivel nacional: el año pasado Magela Baudoin ganó quizás el premio más importante de la historia para la literatura boliviana, pero no vi ningún cartel con su imagen en ninguna ciudad del país, como hacen con los corredores nacionales cuando participan del Dakar, y valga aclarar que hasta ahora ninguno de ellos ha logrado terminar en primer lugar en alguna de sus categorías; pero tampoco la Alcaldía o la Gobernación cruceña se acercaron a felicitar a Magela por este logro” – comenta Adhemar.
Saúl Montaño es periodista, en el año 2012 fue ganador del premio “Nóveles Escritores” con su libro de cuentos Una bandada de pollos en el firmamento. A diferencia de su primer libro, en este mantiene un personaje único en siete relatos, ceñidos a un imaginario; sensibilidad, estilo, espíritu, puteríos, etc. “el anterior libro apuntaba en distintas direcciones, en este apuesto por una: realismo crudo. Otra diferencia importante fue la edición: el primero gracias a la Cámara del Libro por el premio y demás, pero la edición del libro dejó mucho que desear y su distribución fue casi nula”. Saúl se define como narrador porque le gusta mucho y disfruta el desafío de narrar y por lo tanto puede asumirse como tal
DESVELO, es impulsado por sus vivencias y sentimientos personales (que no está dispuesto a desvelar). Este segundo libro fue idea de Antonio Vera, editor de La Perra Gráfica, que consistía en reeditar su primer libro, propuesta que Montaño aceptó, pero en la medida en que avanzaba llegó a una conclusión inconforme, dando cuenta que su forma de encarar y armar los relatos había cambiado en cuatro años, por esta razón encontró puntos en común entre algunos relatos viejos y nuevos que podían sostenerse en un solo libro.
El libro es una larga borrachera, una tras otra, una joda tras otra, mucho sexo y alcohol. El objetivo es retratar a un personaje que “boludea con su tiempo” tratando de darle intensidad a su vida. El autor contrasta estados de euforia, aceleración, modos de actuar, entre la resaca y un estado consiente o no, en el que tienes ganas de tirar, de seguir bebiendo, de pelear, pero en el fondo estás cansado, sabes que lo conveniente es dormir, es decir, la sensatez reposa. Sin embargo Saúl diferencia estas características en el último relato del libro, que es más bien como un bajón donde el personaje toca tierra.
A la pregunta de para qué le serviría al lector este libro, Saúl se remite a una frase de Kafka: “Si el libro que leemos no nos despierta de un puñetazo en el cráneo, ¿para qué leerlo?… Un libro tiene que ser un hacha que rompa el mar de hielo que llevamos dentro.” ¿Entonces para qué sirve Desvelo? Para eso, para partirte el cráneo, el hielo, para quitarte la frigidez, etc.
El caso de Emma Villazón es diferente, ella dejó un vacío en la literatura en el que todavía hay mucho por escribir. La Perra Gráfica ya había conversado con ella sobre una posible publicación, y no dejaron ese acuerdo atrás. En vida, Emma fue una apasionada por la poesía y solía transitar por espacios alternativos donde se fomenta la cultura, y de esa manera conocía el Centro Cultural San Isidro. El director de este espacio, Juan Pablo Sejas, comenta que hay muchas virtudes que rescatar y recordar de la escritora, entre ellas su sed de conocimiento y aprendizaje constante y sobre todo su escritura llena de sensibilidad en cada uno de sus versos.
TEMPORARIAS llevará las características que sólo La Perra Gráfica pone a sus publicaciones, rescatando varios escritos inéditos de la joven poeta que falleció en agosto del año pasado.
Fuente: www.periodistavirtual.com/