04/09/2025 por Sergio León

El llamado, de Daniel Averanga Montiel

Por Mariana Ruiz

Tengo un lugar especial en mi corazón folletinesco para Hans Mendoza y Juan Montiel, investigadores paranormales de nuestra ciudad que vivieron varias décadas atentos a lo que Neil Gaiman llamaba “el mundo verdadero”, ese que nos acecha por las noches cuando no estamos prestando atención.

La presentación de estos cuadernos en un formato de bolsillo que apenas cuesta diez bolivianos, y que nos regala una hora de entretenimiento sin megas ni sintonías wifi, es un anacronismo y en eso radica su encanto, su propuesta innovadora. ¿A quién se le ocurre emular a la editorial Penguin, que hace cien años vendía libros que entraban al bolsillo de la chaqueta y que se podían leer por unos centavos? Solamente a Daniel Averanga se le podría ocurrir un formato así, retro y por lo tanto genial, en estos días de redes y doom scrolling.

Estos cuadernos giran alrededor de las novelas “Emma y los cuadernos de investigación” y “Emma contra el reino de las sombras”. Emma es la nieta y heredera de estos investigadores, quien siempre lamenta no contar con todos los cuadernos y anotaciones de sus parientes. Ella también ha hecho suya la lucha contra el mal y las dimensiones de donde proviene y está dispuesta a enfrentarlo cuando se presente.

En “El llamado”, Averanga se aventura con un tema espinoso y por el que nadie, hasta ahora, ha pagado ni rendido cuentas. La masacre de San Juan en el centro minero Siglo XX, en 1967, que fue una carnicería. Murieron niños y bebés, mujeres y hombres, ancianos y abuelas, bajo la bota militar de la manera más cruel posible.

¿Acaso en este mundo la maldad se paga? ¿Es concebible que los militares asesinos estén siendo perseguidos, uno a uno, su sangre drenada, sus vientres abiertos, como si de un Anchanchu mayor se tratara? Este ser maligno, muy popular en los cuentos de terror del Altiplano, persigue siempre a quienes han cometido crímenes atroces, cobrándose con sangre la sangre derramada.

¿O hay algo más siniestro todavía detrás de estas muertes horrorosas? Juan Montiel tiene una teoría, y Hans Mendoza está dispuesto a acompañarlo hasta despejar todas las dudas, hasta vencer al monstruo y sí, hasta develar el verdadero crimen.

Me alegra saber que estas novelas tendrán una acogida en editoriales fuera del país, porque lo noir, lo sobrenatural, trascienden fronteras. Nos hacen creer en otros mundos, donde la satisfacción de ver derrotado a un ser malvado se da a través del pensamiento mágico. En las historias verdaderas, los cuentos de hadas originales, las brujas malas mueren asadas en sus propios hornos, y el mal es vencido en buena ley, ya sea en este plano lleno de corrupción y ambigüedades, o en el otro, donde existen fuerzas que deberíamos temer y que siempre están al acecho.

Fuente: Ecdótica