Barrientos: “Bolivia en el FILBA debería alegrarnos a todos”
Entrevista a Fernando Barrientos
Por: Mijail Miranda
El Festival Internacional de Literatura de Buenos Aires (FILBA) es, desde hace seis años, uno de los eventos literarios más importantes de nuestro hemisferio. Con el ánimo de generar e integrar las diversas literaturas que se producen en nuestro continente, en 2013 este encuentro se realizó en simultáneo en dos ciudades: Buenos Aires y Santiago de Chile. En esta versión, que comenzó el miércoles y se extederá hasta el 1 de octubre, las sedes son tres, sumándose a ellas Montevideo. Bajo la misma premisa de integración, todos los años se cuenta con un país que hace de invitado de honor. En pasadas ediciones, las naciones homenajeadas fueron México, Colombia, Brasil y Uruguay. Este año, recibimos la grata noticia de que era el turno de Bolivia.
Algunos de los exponentes más representativos de la narrativa nacional contemporánea participan de distintos paneles, conversatorios y talleres. Contamos entre ellos a Edmundo Paz Soldán, Maximiliano Barrientos, Liliana Colanzi, Christian Vera y Wilmer Urrelo. Muchos de estos nombres también son fáciles de detectar en el catálogo (pueden consultarlo en este link: http://goo.gl/gJ8osy) de una de las editoriales independientes más jóvenes e importantes del país. El Cuervo es el sello dirigido por Fernando Barrientos que no sólo ha conseguido que los lectores bolivianos accedamos a títulos y autores actuales en lengua castellana, sino que, desde esa misma inquietud por atravesar fronteras, logró que lo mejor de los últimos años en nuestra narrativa se lea también en otros puntos del continente. Tales son las proyecciones y convicciones con las que hace unos meses lanzó, en asociación con otras casas editoriales, el Premio Internacional Equis de Novela Contemporánea, que en poco verá a su ganador publicado.
A propósito del trabajo editorial, su importancia, la representación boliviana en el FILBA y alguna otra novedad, RAMONA conversó con Barrientos.
– Edmundo Paz Soldán, en una nota para el diario argentino Clarín, haciendo un somero repaso a la literatura boliviana, como aperitivo del FILBA, enumeraba a los íconos de la última generación de escritores nacionales. Curiosamente, El Cuervo tiene en su catálogo a la mayoría de los mencionados. ¿Siente a la editorial como un referente de esta última camada?
En primer lugar nos sentimos muy satisfechos y agradecidos por nuestro catálogo y también por la literatura boliviana. Creo que todas las editoriales bolivianas tienen siquiera a alguno de los autores de esta generación. Pero, es cierto que nosotros armamos nuestro proyecto editorial en base a premisas básicas y problemáticas, como, por ejemplo, “lo nuevo”. Que el FILBA de este año reciba a Bolivia como invitado de honor es una noticia que nos debería alegrar todos.
– Además, tienen también muchos títulos firmados por importantes literatos argentinos. Fabián Casas, Patricio Pron, Federico Falco, por mencionar algunos. Asistir al FILBA será también un reencuentro con esas amistades…
Seguro. Los amigos porteños asistirán a ver a los escritores bolivianos invitados. Los une en algunos casos la amistad y en otros, más bien, afinidades estéticas. Esa era, también, de alguna forma, la intención primera de la editorial: hacer circular literatura contemporánea de otros países latinoamericanos en Bolivia y llevar literatura boliviana de ahora, fuera de nuestras fronteras.
– A modo de puntualización, ¿cuál considera que es “la causa” de El Cuervo?
Creo que una editorial debe definir su “línea” para trabajar mejor, para saber a qué público se dirige. En nuestro caso, como decía, el leitmotiv siempre ha sido “lo nuevo”, que es una noción difícil de delimitar y también de seguir (está también lo generacional, pero en todo caso la edad de un autor no debería ser relevante). Hemos intentado, en estos casi 7 años, publicar libros en sintonía con el presente. El tiempo dirá si lo conseguimos.
– Paz Soldán, en la nota que mencionamos al principio, pareciera enfocarse más en la narrativa. Quizás por las características del festival o, como él mismo confesó, por falta de espacio. Es así que no pudo mencionar a todos los seguramente le hubieran gustado. Tal vez entre ellos se encuentre Julio Barriga, el gran bardo tarijeño, que tiene una estrecha relación con tu editorial. Es más, Cuaderno de Sombra fue el primer paso, la primera publicación…
Casualmente ahora mismo estoy terminando, ya para meter a imprenta, El hombre que amaba a Amy Winehouse de Julio Barriga, un libro marcadamente autobiográfico. Son textos en prosa que Barriga viene escribiendo desde mediados de los 80. La edición de este libro ha resultado un proceso complejo en la selección y orden de los textos. Es un libro especial, sin dudas: asumir otro registro de escritura, el tratamiento de materiales tan próximos como la intensa vida de Barriga, el riesgo de desnudarse en público. Como decía Edmundo en Clarín, este tipo de libros no son comunes en nuestro medio y me parece que son necesarios, porque amplían la paleta de registros.
– ¿Cuál considera que es el as bajo la manga con el que ha conseguido hacerse un espacio no sólo en el circuito nacional, sino, incluso, en el continental?
Tal vez sea una cuestión de timing. Por un lado conectar y, de alguna forma, ser parte de una “generación” a la que le ha tocado hacerse adulta justamente durante un periodo histórico especial y que, más allá de las diferencias, apuesta por la construcción de un proyecto estético nuevo. Por otro lado, creo que también hemos coincido con otras editoriales en el continente en las directrices para armar un catálogo, pero también en la presentación, línea gráfica, un factor decisivo para mí.
– ¿Cuán difícil es edificar y consolidar una editorial independiente en el contexto actual?
No sé si nosotros ya nos consolidamos, en todo caso seguimos trabajando para ello. Pero sí, el trabajo de una editorial independiente en nuestro medio es difícil por el tamaño de nuestro mercado, la precariedad de nuestra infraestructura cultural, entre otros factores. De hecho, esas fueron las motivaciones para que empezáramos. Seguro, con los años, irán naciendo nuevas editoriales independientes.
Fuente: La Ramona
