Asma, un gran compilado de cuentos
Por: Ariel Martínez
El libro de cuentos Asma, del paceño Aldo Medinaceli (Editorial Nuevo Milenio, 2015) es, lo puedo afirmar de entrada, como esos discos de grandes artistas que son un compilado de lo mejor que han producido. Con este libro nos podemos ir de viaje y olvidarnos de todo, incluso de la esposa que nos traicionó con nuestro mejor amigo.
No mencionaré estos cuentos por sus nombres porque no es necesario sino que, para mí, su importancia radica en el sentimiento que emana de ellos, los que me traen a la memoria algo que creí olvidado o, quizá, quise olvidar adrede. Estos cuentos tuvieron la virtud de llevarme a un estado emocional que trasciende lo literario. Los cuentos destilan emociones. ¿No es esa la función de un gran narrador? Contarnos la historia y, como lectores, poder vivirla como si fuera nuestra. Jorge Volpi diría que logramos la empatía con los personajes, con sus historias, porque viven lo que nosotros hemos vivido –o quisiéramos haberlo hecho–. Nos hemos vuelto personajes por el breve tiempo que dura leerlos.
En estos cuentos encontramos que en nuestras vidas había decisiones que debíamos haber tomado de distinta manera; nos cuestionan y nos enemistan con la vida que llevamos. Son cuentos que juegan con los fantasmas que rondan nuestra cabeza. Cada personaje es una versión diferente de las posibles vidas que debíamos tener. Tejida con gran habilidad, llena de mucha honestidad, donde las emociones son los verdaderos hilos conductores de los personajes.
Asma es el resumen de vidas insospechadas; aprovechadas por unos, desperdiciadas por otros y esperando ser vividas en la intimidad que sólo la literatura ofrece.
Asma contiene cuentos con personajes de vidas sucias y tristes, con sentimientos de rabia, miedo y desasosiego. Escritos desde el peregrinaje y la distancia, inspirados en muchos lugares, la escritura alejada de prejuicios. El lugar de las vidas prestadas. Una respiración nacida en la literatura que nos regala historias de anónimos, de los que andan deambulando solitarios por el mundo.
Son cuentos de los sentimientos que creíamos haber perdido. Sus páginas nos dejan con ganas de vivir diferente. Termino de leerla y me compadezco de la tranquilidad de mi vida ausente de respiración.
Fuente: Editorial Nuevo Milenio
