Se puede hablar francamente de todo
Por: Sebastián Antezana Quiroga
Bueno, primero buenas tardes a todos. La opinión que yo tengo de la literatura boliviana es similar a la que han manifestado los aquí presentes. Y coincido con Wilmer Urrelo cuando decía que estamos pasando por un momento saludable. Me parece que es más bien una etapa más bien prolífica, comparada con años anteriores y me parece que en general estamos viviendo con el tema de los premios y los reconocimientos en el exterior y demás, me parece que es una cosa que se va a dar con el tiempo y me parece que una de las principales exigencias para que esto se de tiene que ver con no bajar la guardia. Mantenernos y seguir escribiendo, que lo que prime sea la literatura, pero la buena literatura.
Y en ese sentido me gustaría rescatar algunos aspectos que creo que son importantes de la literatura boliviana. Uno que están teniendo mucho mayor protagonismo escritores o escritoras de otras partes del país, hay una generación joven, bastante importante y bastante influyente que se por ello se les trata con mucha más atención a sus libros.
Podría mencionar a Willy Camacho, que si bien está trabajando el cuento, pienso que la literatura es mucho más integral, por ello creo que éste escritor y los que han nombrado tienen mucha fuerza y sobre todo en cuento que yo me considero incapaz de escribir buenos cuentos pero ellos si lo hacen y eso es muy rescatable; pero sobre todo la idea es despojar la literatura boliviana de un mal que recién estamos empezando a perder que es el tema de que seamos un país con una literatura algo acartonada o más bien solemne, creo que se está perdiendo solemnidad sin perder intensidad y eso posibilita una gran entrada a la libertad creativa. Por eso estamos viviendo una libertad ficcional y literaria.
Se puede hablar francamente de todo, con todas las palabras todos los puntos y todas las comas, y eso me parece que esa es una de las grandes alegrías de la literatura me parece a mí; todo esto claro, dentro de lo que son los concursos me parece que es algo bastante positivo y ya veremos si trae malas consecuencias posteriormente o tal vez no, no lo sabemos.
Me parece que es esencial darle éste tipo de incentivos al escritor boliviano y por último remarcar que éste es un gran momento para la literatura boliviana. Que ojala el circulo de lectores se amplié más y seamos capaces de leernos más críticamente y vernos frente a frente a los ojos y ayudarnos también cuando sea necesario y nada, lean mucho; gracias.
Fuente: Ecdótica
