08/13/2012 por Marcelo Paz Soldan
día nueve de la feria. bitácora de un lector: Todos escriben muy bien

día nueve de la feria. bitácora de un lector: Todos escriben muy bien


día nueve de la feria. bitácora de un lector: Todos escriben muy bien
Por: Ricardo Bajo

(viernes 10 de agosto,2012) Día nueve: Por las mañanas, la feria tiene otro color, otros sonidos. El “supermercado del libro” es invadido por los colegios que llegan en autobuses; cientos de niños y niñas inundan el recinto del COE y los pasillos se convierten en pistas de atletismo con escolares corriendo por todo lado. Debe ser el efecto de los Juegos Olímpicos.
Pero las mañanas también pertenecen a los talleres de creación literaria, una iniciativa saludable de la Cámara Departamental del Libro. Ayer había dos: uno de “Alf” Cárdenas que tuvo que ser desalojado a los jardines y otro de un escritor colombiano nacido en Barranquilla, como el caimán de la canción. Jaime Manrique que lleva años viviendo y escribiendo en Estados Unidos y tiene ese extraño acento de los latinos con larga residencia en el vecino del norte.
Llego tarde y me cuelo como infiltrado en su taller que se llama así: Técnica literaria para escribir ficción: la creación de un personaje. Una veintena de personas, la gran mayoría jóvenes, escriben en silencio, construyendo su personaje. Hay dos o tres changos de la carrera de Literatura de la UMSA.
La primera alumna lee su narración. Y Manrique aconseja: “los detalles concretos anclan un relato, detalles específicos, no vagos”. El cuento de la chica habla de una guerra y el colombiano-estadounidense mete la cuchara: “Si hoy habría que elegir una guerra para tomar partido, escribir y plasmar detalles, me iría a Siria donde todos los días matan y violan a niños”, dice.
Manrique ha sido traído por la Embajada de Estados Unidos en La Paz y anoche presentó su novela histórica sobre Manuelita Sáenz, Nuestra vida son los ríos. Una señora mayor lee otro relato sobre el temor a ser perseguido en el gobierno de Evo.
Y un chango, que ha leído antes, un cuento sobre los jóvenes “hikkimori” japoneses, sentencia: “Borges dijo una vez que el problema de tener enemigos es que al final siempre te pareces a ellos”. Manrique está chocho, sonríe y acaba diciendo: “todos escriben muy bien”.
Fuente: La Razón