El origen del insomnio
Por: anita_1628@hotmail.com
En estos días navideños inmersos en lluvias frescas y amaneceres húmedos, pensé en la cantidad de películas y series que pasan en la televisión con esta temática. Desde ver “Mi pobre angelito” como por enésima vez hasta escuchar villancicos en la casa de tus vecinos, la Navidad es algo que no se puede evitar. Y entonces, ¿cómo es que no salen antologías navideñas de cuentos o historietas en esta época? Advertí que, a comparación de otras temáticas, lo navideño no es tan popular para los literatos. Hay excepciones sí, pero me parece que el entusiasmo no es el mismo. ¿Por qué? Muchos motivos.
En todo caso, me dediqué a reflexionar sobre qué cuentos navideños leí este año. No podía ser tan escaso el material que no hubiera leído ni uno. Así me acordé de un cuento sobre una niña que planea regalarle para Navidad a su papá una guía de las estrellas. Se trataba del cuento de María Rocío Estremadoiro Rioja titulado “El origen del insomnio”, publicado entre los cuentos finalistas del Concurso Plurinacional de Cuento Adela Zamudio 2014.
En este cuento, Estremadoiro nos habla de la importancia que le dan los niños a la Navidad y a sus proyectos. Cuando se obsesionan con algo, es crítico entender el motivo para saber cómo reaccionar. Dependiendo de esto es que luego mantendrán esa perseverancia ya de adultos. La niña que protagoniza el cuento, llamada Lucía, se propone hacer una guía de todas las estrellas que puede ver en el cielo para su papá. Esto significa desvelarse todas las noches y dibujar, una por una, todas las estrellas que aparecen en el firmamento. Los proyectos de los niños pueden ser así de descabellados y altruistas, de ahí lo nobles que pueden resultar sus objetivos.
Es un cuento sencillo con un trasfondo complejo, su lenguaje es bastante descriptivo y ocurrente, divertido de leer. Lucía es una niña fiel a sus deseos, valiente e inteligente. El final, algo injusto a mi manera de ver, es acertado. Después de todo se trata del origen del insomnio, no de un cuento para niños con el final que solemos ver en televisión. Es lo interesante de la literatura, sigue siendo poco común. Podemos ver un montón de historias distintas que involucran a la Navidad y en la mayoría contemplaremos casi los mismos elementos en sus finales. La literatura se desprende de eso y te sorprende con cada detalle, cada aspecto, cada crítica.
Felicito a María Rocío e incentivo a más escritores a plasmar sus pensamientos y vivencias sobre esta época del año tan particular, donde un poco de realidad cruda es necesario para no dejarnos engatusar por la burbuja de falsa paz que suele inundar nuestro televisor. No para mal, sino para reflexionar verdaderamente sobre lo que nos rodea.
Fuente: Los Tiempos
